Foto: AD España

Cómo hacer un cabecero rústico

Han pasado ya dos meses desde que nos mudamos del centro de Madrid a la costa en Galicia. La verdad es que estamos muy contentos con el cambio. Los dos, pero yo especialmente.

Soy muy familiar, así que cada vez que tenía que coger el tren/avión/coche de vuelta a Madrid lloraba al tener que despedirme de mi familia. Aquí los tengo cerca todo el rato y puedo verles siempre que quiera. Pero no es sólo eso. Aquí tenemos mucho más espacio, tenemos un jardín y vemos el mar cada vez que abrimos la persiana por la mañana. Bua. Qué más te puedo decir.

Ya sabes que estoy redecorando la casa. He hecho bastantes avances en el dormitorio principal (aquí puedes ver la renovación de la carpintería, o el antes y depués de la cómoda decorada con stencil) y, como os adelanté en otro post exclusivo para suscriptores, uno de mis planes era hacer un cabecero rústico diy. Aquí te lo presento:

Una (más) de las ventajas de vivir aquí es que vamos a la playa casi todos los días. Le damos un paseo a Peggy, Mick hace unas fotos chulísimas y yo me dedico a recoger todo tipo de palos, cristales y cosas varias que trae la marea (mi padre hace lo mismo). Me lo paso como una ENANA, te lo juro.

Quería integrar la playa y el entorno en la decoración de la casa así que, ¿qué mejor que utilizar esos palos para hacer un cabecero rústico?

Materiales

3 palos, tornillos y lápiz

Herramientas

Sierra de calar o manual

Lo primero fue escoger los palos. Para el diseño de cabecero que tenía en mente (que vamos a denominar rústico-minimalista-chic) tenían que ser unos palos suficientemente largos y relativamente rectos. Que tuviesen sus curvas naturales y tal pero que no se retorciesen o tuviesen ángulos pronunciados.

Una vez escogidos los corté: los laterales de 1m y el travesaño superior de 1,40m para una cama de 1,35m.

Después se colocan en posición sobre el suelo, con los laterales paralelos y el travesaño sobre ellos en la parte superior. Marca con un lápiz la posición del travesaño superior.

Con la sierra corta esa zona que has marcado para encajar el travesaño.

Atornilla las piezas, colocando los tornillos por detrás, claro, para que queden hacia la pared y no se vean.

Para terminar puedes barnizarlo o encerarlo y cuando esté listo puedes colgarlo a la pared o apoyarlo en el suelo.

No te lo puedo enseñar entero porque no quiero que se cuele en la foto ninguna de las cosas que, creo, te van a sorprender cuando enseñe la habitación completa.

En la foto está simplemente apoyado contra la pared pero en realidad lo voy a colgar para que quede más alto y luzca mejor.

Si todo va bien, el jueves que viene por fin os enseño el dormitorio completo. ¡No sabes cuántas ganas tengo!